Todo esto hace tiempo que venimos manifestandolo empero como seres depredadores que somos no paramos y ahora estaremos viviendo los efectos de nuestras acciones .
No es tiempo de lamentaciones ,pero si de previsiones, el cemento y el asfalto que echamos ya no sera necesario por que ante el anuncio del tiempo de VIDA que le queda a la mina, ya habrán quienes estarán pensando ponerse a buen recaudo y estarán pensando en afincarse en otros predios para continuar explotando otros yacimientos y así seguirán creciendo las ciudades fantasma de campamentos abandonados.
Pero la esperanza es que terminara el vertido de la nauseabunda copajira que contamino por mucho tiempo las tierras ,Que cesen las detonaciones de Dinamita que socavan las entrañas del Posokoni. y que la naturaleza retorne a su hábitat. El viento ,como siempre recorra raudo el canadion libre de seres humanos que labraron la soledad de lo que fue nuestro pueblo..
No hay comentarios:
Publicar un comentario