jueves, 30 de enero de 2020

caminar errático

Las direcciones sindicales sobrevivientes de lo que  fue la clase obrera, (con confundir con los cooperativistas que no son clase obrera,) no logran ubicarse en la dinámica política actual, en la crisis desatada por el fraude, se suman a pedirle renuncia a su líder indiscutible y jefe máximo, insustituible conductor del proceso de cambio. A los pocos días de la asunción de la presidente por sucesión constitucional, se apresuran a acercarse, Cuando Evo  Morales anuncia la candidatura de Arce reclaman sus cuotas de
Poder pactadas antes del fraude.
Esta aristocracia del proletariado que ya no lucha por mejores salarios, sino por necesidades propias de clase media de un país capitalistas, como pagar su chalet en la ciudad o  renovar su auto es oportunista y quiere estar cerca del poder por el interés de mantener la sangría que significa actualmente mantener a la minería trabajando a perdida ,endeudada y con metodologías obsoletas.
El socialismo que pregonaban, no funciona por que la clase que según Marx y Lenin debía hacer la revolución ya esta diezmada.
Me atrevería a decir que estarán en el nuevo gobierno y seguirán reclamando su hegemonía, de ser los conductores de los obreros por los caminos de la revolución. En estos tiempos ya nadie piensa en la revolución armada y menos que sea la clase obrera la protagonista, este discurso el viento se llevo, los aires de ahora son otros.